- Temía fracasar, hasta que me di cuenta que únicamente fracaso, cuando no lo intento.
- La mente es como un paracaídas, no sirve de nada si no se abre.
- No te empeñes en ser conocido, sino en alguien que vale conocer.
- El ambicioso es un esclavo de lo mucho que desea, el hombre libre es el que nada desea.
- Saber cuando uno dispone de lo suficiente, es ser rico.
- Ni todo lo es oro brilla, ni todos los que vagan están perdidos.
- Lo pasado ha huido, lo que esperas está ausente, pero el presente es tuyo.
- No podemos elegir como vamos a morir, o cuando vamos a hacerlo. Solo podemos decir como vamos a vivir. Ahora...
- Hablar sin pensar es como disparar sin apuntar.
- Si piensas mucho en mañana, se te puede acabar olvidando el día de hoy.
- La gente nos juzga por nuestras acciones, no por nuestras intenciones.
- El que busca la verdad corre el riesgo de encontrarla.
- En Navidad todos los caminos conducen a casa.
- La Navidad no es una fecha, es un estado de la mente.
- Tal vez el mejor adorno de Navidad es una gran sonrisa...
- El tiempo vuela, pero recuerda que el navegante eres tú.
- Los años enseñan muchas cosas que los días jamás llegan a conocer.
- Haz de tu vida un sueño y de tu sueño una realidad...
- En esta vida solo podría avergonzarme de no ser yo mismo.
- La felicidad se ha de encontrar a lo largo del camino y no al final, porque entonces ha terminado el viaje.
- Mi felicidad consiste en que sé apreciar lo que tengo y no deseo con exceso lo que no tengo.
- La vida no se ha hecho para comprenderla, sino para vivirla.
-Vive como si fueras a morir mañana,aprende como si fueras a vivir siempre.
- Si no actúas como piensas, vas a terminar pensando como actúas.
- Hay que vivir como se piensa, sino se acaba por pensar como se ha vivido.
- El verdadero amigo es el que está a tu lado cuando preferiría estar en otra parte.
- Un hermano puede no ser un amigo, pero un amigo será siempre un hermano.
- No impongas a nadie lo que tu mismo no puedas soportar.
- El que busca un amigo sin defectos, se queda sin amigos.
- Una parte de los hombres actúan sin pensar y la otra piensa sin actuar.
- Quien poco piensa, se equivoca mucho.